Más de un día se tardó la rectora de la UV, Sara Ladrón de Guevara, en ofrecer su versión sobre el presunto desaire que le hizo la periodista Carmen Aristegui a la Medalla al Mérito que le sería entregada el pasado lunes durante la FILU.
Según Sarita, la famosa conductora radiofónica y televisiva no vino por los típicos “problemas de agenda” –que suelen ser meros pretextos- y no porque hubiera tomado alguna postura respecto de la disputa que existe entre la institución y la familia del recientemente desaparecido escritor Sergio Pitol.
Pues qué poquito ha de valer entonces para Aristegui una distinción como la que la UV pretende otorgarle, como para dejarla para mejor ocasión, ¿no cree usted?





