¿Recuerda todo el rollo que armaron los partidos tras los sismos del año pasado, cuando anunciaron que donarían tooooooooodas sus prerrogativas para apoyar a los damnificados y las labores de reconstrucción?
Pues no sólo no donaron ni madres. En cosas que no se pueden comprender por su nivel de bajeza, resulta que Morena, donde se dicen puros y honestos y juran que van a “transformar” el país, hizo mal uso –o lo que es lo mismo, desvió- de los recursos del fideicomiso creado para los damnificados por los sismos y destinaron poco más de 64 millones de pesos para el pago de dirigentes y operadores de dicho partido, tal como consta en una queja presentada ante el Instituto Nacional Electoral.
Pero resulta que como ya tenemos la elección encima, en el INE de plano aplazaron la sanción a la que es acreedor este partido –y que podría alcanzar una multa de 197 millones de pesos- hasta el mes de agosto.
De comprobarse esta irregularidad, ese partido debería hasta perder el registro. Pero por lo que se ve, en el INE tampoco le quieren jalar los “bigotes al tigre”. Aunque eso signifique condenar al país con esa bola de verdaderos mafiosos.





