La protección de las Entidades Federativas, está prevista en el artículo 119 de la Carta Magna y se remonta al texto de la Constitución de 1824, considerado como el primer documento fundamental que dio la formalidad y estructura, necesarias para delinear la expresión de Soberanía Popular, que a través del Congreso Constituyente definió la forma de gobierno democrático, republicano, representativo y federal; compuesto de las provincias que con diputados electos para ese fin, suscribieron el Pacto Federal.
En ese sentido, quedó establecido el deber de los Poderes de la Unión, de proteger a las Entidades Federativas, “contra toda invasión o violencia exterior”; y lo mismo sucedería para aquellos casos de sublevación interior; reservando el derecho de solicitar el apoyo federal al Poder Legislativo Local y si no estuviere reunido, al titular del Poder Ejecutivo de la entidad.
Ya desde la Constitución de 1824, y en el artículo 34 del Acta Constitutiva del mismo año, se garantizó también a las Entidades Federativas la forma de gobierno Republicana, y en reciprocidad, los estados se comprometían a sostener el Estado Federal.
En la Constitución de 1857, fue suprimida la forma de gobierno republicana; y fue restablecida en la Constitución de 1917. Ahora que por lo que corresponde a las intervenciones del Gobierno Federal para apaciguar los graves conflictos que se presenten en cualquier parte del territorio nacional, se requerirá de la solicitud de las fuerzas federales, siempre a través del Poder Legislativo Local o como ya se dijo, en los periodos de receso del Legislativo, corresponde al Ejecutivo hacer la solicitud respectiva.
El nuevo gobierno que encabezará el Licenciado Andrés Manuel López Obrador, acuerpado en la Cámara Federal de Diputados y en el Senado de la República, seguramente tiene contemplado en su agenda, la definición de lo que será la participación del Heroico Ejército mexicano y la Marina Armada de Mexico, junto con la Policia Federal y las fuerzas de Seguridad Pública de los Estados, y el H. Congreso de la Unión, acatando la Ley de Seguridad Interior, con las reformas y adiciones que sean necesarias, tendrán que sumar esfuerzos para terminar de una vez por todas con la inseguridad, la violencia y la impunidad, que se han enseñoreado en diversas regiones del país.
Por el bien de México y de los mexicanos, deseamos que se cumplan las buenas intenciones de AMLO.
