“El Chaquiras”, viejo cargador del mercado Malibrán de Veracruz, bebió un último trago de Tonayan antes de quedar dormido por la borrachera y por consecuencia morir aplastado debajo de las llantas de un camión torton.
Su cuerpo inmóvil quedó boca arriba, con los ojos entre abiertos y mirando al cielo.
Testigos que no podían dar crédito a lo ocurrido, narraron que “El Chaquiras” y un camarada suyo de nombre Gabriel “agarraron la jarra” desde ayer y que tomaron hasta quedar dormidos debajo de una unidad de carga pesada. Nadie imaginó lo que ocurriría al día siguiente.
Tenía aproximadamente 55 años de edad el día que el viejo cargador murió esta tarde de lunes.
Este día, el chofer de la unidad vehicular arrancó el motor, metió primera velocidad y rodó las llantas a baja velocidad sin darse cuenta que debajo, embrutecidos todavía por el alcohol, dormían plácidamente “El Chaquiras” y su amigo Gabriel.
A los desafortunados hombres ni tiempo les dio de correr, pues antes de que abrieran los ojos, los neumáticos ya les pasaban encima. “El Chaquiras” se llevó la peor parte, murió de manera instantánea, mientras que Gabriel resultó lesionado del estómago y las piernas.
Al ver lo ocurrido, el operador del torton descendió de la unidad y se echó a correr con rumbo desconocido.
Los trabajadores del mercado notaron que algo andaba mal y al acercarse a auxiliar a los dos sujetos que yacían tendidos sobre el pavimento descubrieron que uno había muerto y que el otro, aún con vida, se retorcía del dolor.
El accidente ocurrió en la zona de carga y descarga, del lado del fraccionamiento Floresta.
“El Chaquiras” quedó inmóvil, tal cual lo dejó el torton, a la espera únicamente de la confirmación de su propio deceso. Junto al cuerpo del viejo cargador quedó un envase vacío de Tonayan, cuyo último trago alcanzó a sorbetear el hombre antes de morir aplastado.
