México 1968

Gustavo Díaz Ordaz, Luis Echeverría y el General García Barragán; Guevara Niebla, González de Alba, Álvarez Garín; el Rector de la UNAM Javier Barros Sierra; José Revueltas, Carlos Monsiváis y muchos intelectuales, escritores y políticos de esa época; en la Disputa por la Nación.

El pleito qué comenzó a mediados de julio de 1968, entre estudiantes de la Vocacional número 5 y estudiantes de la Preparatoria Isaac Ochoterena; camorra estudiantil que se magnificó por la irresponsable intervención del cuerpo de granaderos, policías preventivos y agentes de la Dirección Federal de Seguridad; todos juntos y en mayor o menor medida, contribuyendo a las marchas estudiantiles, subidas de coraje y de presión por la represión con que los granaderos pretendían desarticularlas, bajo el argumento de resguardar la seguridad pública.

De ahí en adelante, la participación de los maestros cuya intervención se dio a partir de los abusos cometidos por granaderos, policías uniformados y vestidos de civil, en agravio de los estudiantes, más los reclamos de padres de familia y el hartazgo de la clase pensante, que mientras pudo, criticó al gobierno por el uso abusivo del poder público y de las instituciones político policíacas a su servicio, generándose a partir de ese momento un clima de inconformidad social en contra del gobierno.

Lo demás, se ha contado y escrito con diferentes versiones, pero todas confluyen en que si hubiera habido la interlocución política adecuada, no se habría llegado al derramamiento de sangre ocurrido en la Plaza de las Tres Culturas, el fatídico día DOS DE OCTUBRE de 1968, que no se olvida y que es la razón por la que el expresidente Luis Echeverría Álvarez, a sus 95 años de edad y a cuarenta y dos años de haber concluido su mandato, ha sido acusado por la matanza de estudiantes y desaparición forzada de personas.

La Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (FEMOSPP), en los años 2002 y 2006, acusó al ex presidente Luis Echeverría Álvarez, como presunto responsable de la matanza de estudiantes en la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco en 1968, mediante un juicio de amparo logró un auto de libertad. En 2006 de nueva cuenta se acusa al Expresidente Echeverría, por el mismo delito y se le decreta por su edad prisión domiciliaria; aunque nuevamente logra evadir la sanción por prescripción del delito en 2005. Otra acusación posterior por genocidio, también la libro y por ende quedó impune y vive en la CDMX.