Desde luego que no hay uno solo de los afiliados al partido MORENA, que esté en desacuerdo con la encuesta realizada para determinar si debería continuar la construcción del NAIM o cancelarla para que a partir del 1º de diciembre próximo se inicie la adecuación y remodelación del aeropuerto de Santa Lucía en conexión con el Aeropuerto Internacional de Toluca.
Y no solo los miembros activos de MORENA están en favor de las medidas que antes de tomar posesión del cargo, ha determinado AMLO; sino también de la manera “chusca” con que se expresa el señor Presidente Electo en todas sus entrevistas, pues hay que reconocer que ha puesto de moda los estribillos de “me canso ganso”, prensa “fifi”, “la mafia del poder”, “constitución amorosa”, “lo que diga mi dedito”, “corazoncitos”, “perdón y olvido” etc. y otras expresiones populares que han dado el efecto esperado por el Presidente Electo, para fortalecer el rating de aceptación que tiene en todos los estratos sociales que lo llevaron al triunfo.
La última gran determinación de AMLO, para cancelar el NAIM, apoyándose en el resultado de la multicitada encuesta, y con el fundamento de que habrá de gobernar “obedeciendo al pueblo” en el entendido de que la democracia participativa se dá, cuando existe “un gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”; solo que se ha olvidado al Presidente de que las minorías, de las que él formó parte en su pasado reciente, también deben ser escuchadas y que su participación para mantener la unidad nacional, es necesaria y obliga a las concertaciones que permiten los espacios políticos para mantener la gobernabilidad y de la gobernanza.
Quienes ahora señalan que no va a haber un nuevo y moderno aeropuerto, y que saldrá más caro que si se hubiera seguido la construcción del NAIM; la solución por la que ha optado el nuevo gobierno para las inversiones multimillonarias que tendrá que aplicar en Santa Lucía, que según las críticas expresiones de otros, nos permitirá a los mexicanos cuando menos, ver cómo se repelen en el aire los aviones, evitando la catástrofe que resultaría de un choque de aviones en las alturas, como lo han advertido algunos expertos en aviación.
Lo que importa en política, es mantener la base social constituida por 30 millones de votantes, y para AMLO, representa cuidar su triunfo inédito, histórico y difícil de repetir, como candidato presidencial que hoy toma sus decisiones obedeciendo al pueblo.
