Botellas, vasos y bolsas de plástico, platos de unicel, además de coronas y flores marchitas, abundan en los basureros del Panteón Xalapeño luego del Día de Muertos.
De acuerdo al encargado de este cementerio, Luis Manuel Rivera Aguilar, la cantidad de desechos se triplica tras el aumento de visitantes: “Se nos va al 300 por ciento, fácil se nos va al 300 por ciento”.
El amarillo del cempasúchil y los demás colores que adornan las tumbas en pocos días serán basura al marchitarse.
“Ahorita el panteón tiene un colorido muy bonito, sin embargo en unos 15-20 días esta flor se marchita y se nos convierte en basura. Tenemos que redoblar esfuerzos para medio mantener este lugar. Tenemos los lugares para ello con bastante basura, en cualquier ratito viene el camión, se la lleva y empezamos a trabajar de nuevo”, comentó.
En este panteón, en el costado izquierdo de la entrada, los letreros indican cómo deben separarse los desechos con el fin de aprovechar los orgánicos. Lo que más abunda en estos es el unicel y el plástico.
“Estamos trabajando con el Ayuntamiento a través del área de Limpia Pública a efecto de que se vaya ya clasificando la basura. No todo es basura, hay por ejemplo, todo lo que corresponde a lo que es la flor, las ramitas y todo esto, para que sea hecha composta, entonces ya nos reduce el volumen de esa basura”, explicó el administrador.
“Vienen dos camiones, el camioncito verdecito que se lleva la flor ya marchita y el otro que viene prácticamente a recolectar lo que es la basura, como los plásticos que traen las personas, el unicel de las familias que vienen a comer aquí con sus seres queridos, etc, pero así es como estamos llevando a cabo ya esa recolección”.
Luis Manuel Rivera Aguilar refiere que la visita de las más de 32 mil tumbas representa un reto para los trabajadores que limpian este cementerio.







