Un grupo de choferes del transporte público de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, bloquearon la salida de camiones urbanos de la ruta Díaz Mirón-Las Vegas, para exigirle a sus patrones mejores condiciones laborales.
Los manifestantes detuvieron la marcha de sus unidades y le exigieron al resto de sus compañeros que hicieran lo mismo para sumarse a la protesta.
Pidieron mejores condiciones para poder trabajar y acusaron que los concesionarios no les ofrecen lo necesario para laborar a bordo de los camiones.
Por su parte, los concesionarios respondieron que el reclamo fue organizado por un grupo de choferes que están imposibilitados para operar, debido a que no pasaron el antidoping.
Eliseo de Jesús Cruzado, concesionario de ruta Díaz Mirón-Las Vegas, señaló que los manifestantes se ostentan como integrantes de un sindicado de choferes, pero que en realidad son personas que no pasaron las pruebas anti drogas del último reordenamiento del Transporte Público.
«Hay quienes no pasaron el exámen antidoping que implementó la pasada administración, entonces no cumplen con los requisitos, por eso se les ha dejado pendientes hasta que cumplan con el antidoping y algunos otros requisitos».
Los choferes también dijeron que muchas de las unidades no están aseguradas, que no les pagan a tiempo sus salarios y que no tienen prestaciones de ley, argumentos que fueron negados por los patrones.
Jorge Ramos, presidente de la Asociación de Transportistas del Estado de Veracruz (ASTRAVER), afirmó que el 9 por ciento de los 8 mil choferes del Transporte Público no pasaron el antidoping, siendo ese mínimo porcentaje de trabajadores el que organizó la protesta.
Al final fue necesaria la presencia de eventos de la Secretaría de Marina Armada de México para calmar los ánimos y tratar de mediar en el asunto.
