Como ya es sabido, el Primer Tribunal Colegiado de circuito determinó que el caso en el que se le atribuye a Javier Duarte de Ochoa, Francisco Valencia García, Mauricio Audirac Murillo y Carlos Aguirre Morales, presunto desvío de recursos públicos provenientes de la Federación a la Comisión Estatal de Agua del Estado de Veracruz, no es competencia de tribunales del estado de Veracruz, sino de la Federación.
La decisión judicial es irrebatible por provenir de un juicio de amparo en revisión (109/2019) del índice del Primer Tribunal Colegiado en materia Penal del Séptimo Circuito con sede en Boca del Río, por lo tanto no existe recurso alguno que la Fiscalía General del Estado de Veracruz pueda interponer.
Frente a ello, la juez de Control de Proceso y Procedimiento Penal Oral del Distrito Judicial de Xalapa, Veracruz, con sede en Pacho Viejo, Veracruz, Alma Aleida Aosa, ya pronunció auto en el que da cumplimiento a la ejecutoria federal, y ordena remitir el proceso en contra de los ex servidores públicos, a la oficialía de partes común de los juzgados de distrito (federales) para la asignación del juzgado que deberá continuar con la integración del caso, sin embargo, en la opinión de diversos juristas, con base a que todo acto de molestia (dígase orden de aprehensión o auto de vinculación a proceso) debe provenir de un juez competente de acuerdo a lo que mandata el articulo 16 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, al haber sido un juez incompetente el que libró órdenes de aprehensión y autos de vinculación a proceso de los ex funcionarios, todo lo actuado quedará anulado y así tanto Duarte de Ochoa, Valencia García, Audirac Murillo y Aguirre Morales, quedarán exentos de los efectos legales consignados en el proceso que ahora se entiende que fue por necedad y obsesión de Miguel Ángel Yunes Linares, quien teniendo a su mando (hasta estas fechas incluso) a la Fiscalía General del Estado a manos de su abogado personal Jorge Winckler Ortiz, y al propio Tribunal Superior de Justicia.
Hoy asumirán las consecuencias de que se evidencia, que lo único que se hizo fue simular justicia, cometiendo arbitrariedades legaloides, solo para encarcelar a sus objetivos políticos engañando al pueblo de Veracruz.
Está en manos de la justicia federal el destino de quienes ocuparon los cargos de gobernador del estado, secretario de Finanzas, director del organismo público CAEV y subsecretario de Finanzas en el sexenio que encabezó Javier Duarte de Ochoa, quienes por las opiniones de conocedores del tema, anticipan que serán liberados de los cargos imputados por Miguel Ángel Yunes Linares y su arlequines Jorge Winckler Ortiz y los malos jueces del Poder Judicial del Estado.





