La Arquidiócesis de Xalapa afirmó que el ambiente cristiano de alegría por la cercanía de la Navidad contrasta con la realidad que la gente vive todos los días.
Señala que no hay reunión, encuentro o conversación donde no se lamente de las crisis que está viviendo.
“Desgraciadamente el pueblo no vive feliz, se observa mucho desconcierto e incertidumbre, hay un ambiente de desánimo y descontento social”, subrayó.
Por ello, el vocero José Manuel Suazo Reyes dijo esperar que el periodo de las posadas traiga paz y concordia y permitan contemplar el nacimiento de Jesús a través de la escucha de la Palabra de Dios, la oración, y la experiencia positiva de compartir y de vivir momentos de una sana alegría.
Recuerda que el tercer domingo de Adviento se conoce en la liturgia de la Iglesia católica como el Domingo de la Alegría y en la corona de adviento se representa con el cirio de color rosa.
“La liturgia nos invita a estar alegres porque estamos muy próximos de celebrar la santa Navidad”, añade.
La palabra de Dios, expone, explica cuál es el motivo del por qué debemos estar alegres: El profeta Isaías lo explica de esta manera: “Que se le alegre el desierto y se cubra de flores… que se alegre y dé gritos de júbilo… he aquí que su Dios viene ya para salvarlos (Is 35, 1-6). Por lo tanto, la razón de esta alegría es la llegada del salvador.





