Por culpa de las "transas" de Javier Duarte, es la fecha que están "congeladas" las donaciones de Pemex a Veracruz

Interesante lo que publica el bien informado Darío Celis, este día, en el diario El Financiero:
«El eslabón perdido de los pagos en Pemex… Se estima que estando al frente Lozoya (de PEMEX), por ahí se drenaron a través de donaciones a gobiernos y municipios unos 12 mil millones: 3 mil en efectivo, 6 mil en asfalto y 3 mil en combustibles. Fue una bolsa que manejó a discreción Froylán Gracia García. Hablamos del coordinador ejecutivo de la dirección general, uno de los principales operadores de Lozoya, que encontró en esa gerencia una ventana para lucrar económica y políticamente. Con Felipe Calderón esa área dependía de la dirección corporativa de administración. Pero Lozoya promovió una reforma a la Ley de Pemex para arrogársela. Pidió a su abogado, Javier Romo Michaus, exlegal de FEMSA, hacerla en 2013. Así, la estratégica gerencia de los 4 mil millones de pesos anuales en donaciones, pasó en pocos meses de la dirección corporativa de administración, a depender directamente del famosisímo ‘Froy’. Aquél se la arrebató a Víctor Díaz, secretario particular por años de Emilio Lozoya Thalmann en la extinta Secretaría de Minas e Industria Paraestatal y el ISSSTE, con el pretexto de dársela a Lozoya junior. De inicio Gracia García olfateó la veta de negocios que tenía en las manos y no dudó en hacer lo que mejor hizo en Pemex: operar. Designó a uno de confianza para dirigirla: Bernardo Bosch, que la 4T recién inhabilitó. El 90 por ciento de los 12 mil millones de pesos sobre los que tuvo el control en tres años, se dispersó en donaciones a 10 estados, los denominados ‘prioritarios petroleros’, siendo Veracruz el que al año ‘jalaba’ cerca de 500 millones. ‘Froy’ trabó una fructífera y lucrativa relación con JAVIER DUARTE a partir de esas donaciones, mismas que hoy son investigadas por el gobierno morenista de CUITLÁHUAC GARCÍA, que por el momento no puede recibir dinero de Pemex. El manejo de las donaciones se hacía a través de cuatro subgerencias que estaban localizadas en las regiones de esas 10 entidades; se bajaban a gobernadores y munícipes a discreción, a través de un comité en el que Froylán era juez y parte. En ese grupo de responsabilidad intervino otra funcionaria clave en todo este tinglado: Rosario Brindis, una diputada del Partido Verde Ecologista, muy cercana al entonces secretario de Hacienda, Luis Videgaray. Brindis, nombrada enlace legislativo por Lozoya, se saltó los protocolos y lineamientos de ese comité que encabezaba Gracia García y de la que ella misma era la número dos; trataba directamente a los políticos, ordenaba a los subgerentes y acordaba, en la mayoría de las ocasiones, verbalmente para que no hubiera registro. La exlegisladora tiene una investigación abierta por haber incidido en la adjudicación de contratos de Pemex Exploración y Producción a empresas vinculadas a su esposo, y además es señalada de haber participado en los sobornos para que se aprobara la Reforma Energética. Ahí la historia de la gerencia de desarrollo social.»