Hace casi una treintena de años, Sveltana y Yuriy Panteleenko, una pareja de Moscú, Rusia, rescataron a un oso huérfano, y decidieron adoptarlo y darle un hogar. En aquel entonces era solo un cachorro de 3 meses. Ahora es un oso adulto de casi 200 kilos y 2 metros de alto que convive como uno más en la familia.
A pesar de su envergadura, Stepan está tan domesticado que es posible verlo sentado en el sofá viendo la tele o ayudando a regar las plantas. Lejos de lo que pueda parecer, dada su naturaleza, el oso es muy sociable y, en palabras de sus dueños, jamás ha mordido a nadie.
Su día a día se resumen en ingerir 25 kilos de pescado, practicar un poco de futbol en el jardín y de vez en cuando posar para las cámaras de distintos medios.
Hasta la fecha ha ilustrado páginas para Daily Mail, The Sun, The New York Post, y ha trabajado con modelos tailandesas, australianas, alemanas y británicas en sesiones de fotos que no duran más de 30 minutos cada una.