En torno a la detención del ex secretario de Gobierno durante el mandato de Miguel Ángel Yunes Linares, Rogelio “N”, diputados federales de Veracruz emitieron una postura.
Rechazaron que la detención de Rogelio “N”, se deba a una persecución política.
De igual manera, hicieron hincapié que buscan sacar raja política de esta situación, además de señalar que Yunes Linares ha sido señalado como el gobernador más represor de la historia de Veracruz, además de tener acusaciones de pederasta por parte de la periodista Lydia Cacho.
A continuación, se transcribe textual el discurso pronunciado:
Las y los diputados de Morena en esta Cámara de Diputados rechazamos tajantemente que la detención del ex secretario de Gobierno durante el mandato de Miguel Ángel Yunes Linares, Rogelio “N”, se deba a una persecución política, como lo ha declarado el ex gobernador de Veracruz.
En efecto, el pasado sábado 13 del presente mes, Rogelio “N” fue detenido en Tuxpan por una denuncia de violencia intrafamiliar. Sin embargo, cabe señalar que se está en presencia de un asunto intrafamiliar que se dirime en el marco de los procedimientos judiciales normales y éstos no pueden esperar a que terminen las elecciones para proceder conforme a derecho, por lo que objetamos las declaraciones de quien sólo demuestra su afán de calumniar al gobierno veracruzano y victimizarse como partido político. En Veracruz, los tiempos de la justicia ya no son los tiempos de la política. No por tratarse de un político reconocido se le puede sustraer del marco de la justicia, ni ésta puede esperar a que pasen las elecciones para ejercer sus mecanismos. Nada más lamentable que la violencia intrafamiliar, pero peor aún cuando se vive en el seno de familias con personajes políticos que tienen todo el poder de las influencias para evitar que se le haga justicia a la parte afectada. Pero ello lo tendrán que decidir los jueces del caso.
Es de lamentarse que la clase política que estuvo en el poder en Veracruz siga queriendo un trato preferencial y que se pugne por revictimizar a la parte ofendida haciendo que se retrase el ejercicio penal cuando existen elementos para llevarlo a cabo. La dirigencia nacional y estatal del PRD quiere hacer creer a la opinión pública que se sigue haciendo lo mismo que cuando ellos ejercían el poder en Veracruz, dictando al poder judicial y al órgano de procuración de justicia lo que debía de hacerse y cuando para la obtención de sus fines políticos.
Quieren a todas luces sacar raja política de esta detención para tratar de promocionar a la desprestigiada alianza que han establecido con sus antiguos contrincantes prianistas, con tal de detener el avasallador avance de Morena en el estado.
Al respecto les recordamos que ninguna autoridad moral tiene Miguel Ángel Yunes en sus calificativos lanzados contra el gobierno de Veracruz, respecto al caso de Rogelio “N”.
El que fuera el gobernante más represor en la historia de Veracruz no puede tratar de sacar raja política de un asunto que está en manos de la justicia. El que fuera un gobernante al estilo del viejo régimen que puso a su Fiscal Winckler a esconder expedientes de la delincuencia mientras se perseguía a opositores no puede hoy decir que el actual gobierno veracruzano actúa igual que él. El que ha sido señalado por la periodista Lidia Cacho de formar parte de una red de pederastia y que todavía tiene abiertos procesos en su contra no puede decir que Rogelio “N” es un preso político. La costumbre del régimen anterior, de la que Yunes Lunares es caso ilustre, era poner a los pies de la política tanto al órgano de procuración justicia como al de administración de justicia. Ese tiempo se acabó. En los procesos de transformación que se vive en México y en Veracruz se tienen plenamente separadas las facultades del poder ejecutivo, del judicial y de la Fiscalía. El caso de Rogelio “N” tendrá que ajustarse igualmente a tales facultades.