“Les voy a contar de la vez que me rechazaron por ser otaku”, comienza diciendo una joven en su cuenta de TikTok para después narrar su ‘trágico’ y muy corto noviazgo con un joven que la dejó por sus gustos.
“Y es que la gente que es nueva en esto del anime cree que es broma que antes nos pegaban, no, neta, o sea, nos pegaban”.
Lissetcaast, nombre de usuaria, cuenta que tenía dos cuentas de Facebook. Una donde publicaba cosas de ‘gente normal’ y uno más personal donde subía cosas de cosplay.
Un día comenzó a salir con un chico, quien después de un rato le pidió que fueran novios, a lo que ella accedió. Pero el amor duraría poco luego de que él descubriera su lado otaku.
“Encontró mi Facebook y me pone: ‘eres algo rara’. Y yo le contesté que sí: ‘pero este Facebook lo uso solo para eso, yo jamás te voy a hablar del anime y de ser otaku’”
El joven le cuestionó sus fotos, pues no entendía lo del cosplay. “No, mejor no seré tu novio”, remató diciendo.
“Y si te asusta lo que hago, pues ni modo, yo soy normal. Para que vean, amigos, antes sufríamos”, finalizó la chica.
Lisset Castro cuenta con más de 331 mil seguidores, tiene 2.8 millones de ‘Me gusta’ en su cuenta de TikTok, donde explica datos de ciencia (pues es química) combinado con el anime. También responde dudas de sus seguidores.
Otaku
El término otaku se emplea popularmente en Japón y en otros países y se ha convertido en sinónimo de persona con aficiones apasionadas al anime, manga o dorama. El uso contemporáneo de este término se originó en un ensayo de 1983 por Akio Nakamori en la revista Manga Burikko. (Wikipedia)