Notiver Speshial Edishion
@pablojair
Este miércoles se dio a conocer un caso para el anecdotario del típico mexicano que siempre se quiere pasar de astuto y termina siendo un verdadero gandalla.
Ayer se reveló (chale, ¿por qué hasta ayer?) que dos vatos de 35 y 39 años de edad se hicieron pasaron por adultos mayores el pasado 27 de marzo en la unidad de vacunación de la alcaldía Coyoacán y recibieron la primera dosis de vacuna contra el COVID19.
“Con el cabello y cejas pintados con canas y documentos pertenecientes a familiares directos, dos hombres de 35 y 39 años recibieron la primera dosis de la vacuna contra Covid-19 en la alcaldía Coyoacán… Uno de los sujetos fingió tener discapacidad, ya que se trasladó hasta el centro de vacunación en una silla de ruedas. Ambos portaban careta y cubrebocas, también usaban la gorra de sus chamarras para impedir ser reconocidos”, detalla una nota de El Universal.
Fueron descubiertos y detenidos porque se les hizo una revisión a sus documentos y encontraron credenciales del Instituto Electoral Nacional (INE) y dos comprobantes de domicilio, todos apócrifos, presentando documentación del padre de uno de ellos, mientras que el segundo de uno de sus tíos.
Por lo pronto, un juez determinó que los ahora imputados deberán permanecer con la medida cautelar de prisión preventiva justificada; además, fijó el plazo de un mes para el cierre de la investigación complementaria.
Pero seguramente tendrán una segunda dosis, ¿no? ¿O de plano no tendrán derecho ahora que se les inoculó la primera?
Aquí en este espacio hemos criticado que el Plan de Vacunación es verdaderamente lento y selectivo; sí, fue una gandallez de estos dos vatos el hacerse pasar por abuelitos y recibir una vacuna que no merecían todavía, por aquello del calendario que lleva el gobierno federal.
Pero de igual manera, creo que esto también es síntoma de una desesperación de quienes ya quieren vacunarse y tendrían, en teoría, todo el derecho de exigir que se les proteja su vida, más si el gobierno es el que tiene el control de todas las vacunas.
No se justifica la acción abusiva de los dos individuos, pero al final de cuentas ellos también tienen derecho –como cualquiera– a pedir que se les vacune del terrible mal que azota al mundo, especialmente en un México donde no se aplican medidas restrictivas o coercitivas para que la gente use aunque sea un trinche cubrebocas.
O sea, ¿de qué sirve que muchos se cuiden, tomen las medidas sanitarias adecuadas, hagan confinamiento, si al final del día también están expuestos mientras no tengan anticuerpos y además tienen qué esperar hasta que el gobierno decida cuándo se les va a vacunar?
Ayer decíamos que México apenas lleva un porcentaje del 7% de vacunación en el país; por ahí comentan que es el 2% en realidad, si se cuenta solamente a los que ya tienen su doble dosis.
Así que a nadie sorprende que existan situaciones como la que se dio a conocer de estos tipos; o que de manera más discreta, haya quienes busquen mover influencias para proteger a su familia y eso no se puede juzgar mal, porque todos tenemos derecho a la vida.
BLOQUEOS EN EL NORTE
Que luego de la detención de Goyo Gómez, aspirante del PRD a la alcaldía de Tihuatlán, se dieron por momentos bloqueos en calles de esa región que recordaron a las movilizaciones y bloqueos que hacen los malandros cuando apañan a sus líderes… ¿Será?
¿LA CÍA DETRÁS DE LA REFINERÍA?
A ver si no sale el zonzo de “Epigmeo” a decir que la CIA está detrás del incendio de la refinería de Minatitlán, aunque por 150 millones capaz sale con que fueron los extraterrestres neoliberales. Otros tuiteros sospechan que fueron Brozo y Lopez Dóriga.