Una joven de 17 años decidió empezar a ahorrar todo el dinero que recibía como parte de su beca Benito Juárez para emprender su negocio de raspados en su pueblo natal.
Esmeralda Guadalupe López Martínez estudia la Preparatoria en la escuela pública Tezontla en la localidad de Chapulhuacanito en el municipio de Tamazunchale, San Luis Potosí.
A pesar de su corta edad, Esmeralda quiso empezar a ganar su propio dinero y apoyar a su familia con los gastos, por lo que aunque la pandemia de COVID-19 se cruzó en su camino la joven ha continuado con su emprendimiento
Ahorró su beca Benito Juárez
Invirtió cinco depósitos de la beca Benito Juárez, aproximadamente 17 mil pesos, en adaptar un local y comprar los materiales e ingredientes necesarios para preparar sus raspados y cumplir su meta.
Esmeralda recordó que desde hace mucho tiempo tenía la intención de vender algo, hasta que un día tomó la decisión, salió de su casa y empezó a ofrecer raspados en el centro de Chapulhuacanito.
Así fue como nació el negocio, que actualmente atiende junto con su mamá de lunes a domingo de 12 del día hasta las 19:00 horas, sobre la carretera federal Tamazunchale – Huejutla a la altura de la purificadora de agua en Chapulhuacanito.
La estudiante asegura que “gracias a Dios” le ha ido muy bien con su pequeño negocio, por lo que planea destinar todas las ganancias en un futuro a sus estudios profesionales.
Esmeralda exhortó a todos los jóvenes, que como ella reciben la beca Benito Juárez, a ahorrar e invertir el dinero en cosas productivas.
“No gasten su dinero, el dinero que nos dan puede tener muchos frutos, lo podemos usar para muchas cosas, es poquito el dinero que te dan, pero con ese dinero puedes tener más dinero y no tan solo en cosas materiales para gastarlo, sino que puedes tener otras cosas que en verdad te pueden llevar a algo más”, comentó