José Ortiz Medina
Pues que Nicolás “N” sí es cuñado de Daniela Griego Ceballos, pues la hermana de ésta, Jéssica Griego Ceballos, está casada con quien hasta hace unos días iba en caballo de hacienda en pos de la candidatura a la alcaldía de Minatitlán por la alianza PRI-PAN-PRD.
Como es sabido, a Nicolás “N” –quien fue detenido el pasado 23 de abril- enfrenta imputaciones por los delitos de privación de la libertad física y amenazas. Se le dictó prisión preventiva oficiosa de 1 año, hace cuatro días y la madrugada de este viernes un juez lo vinculó a proceso.
Esta cuasi tragedia griega no debe ser fácil para la directora del Instituto de Pensiones del Estado. Pero tampoco debe aprovecharse esta circunstancia para linchar mediáticamente a la servidora pública. Porque, ¿quién no ha tenido un pariente político o consanguíneo incómodo?
El problema para Daniela no es de índole jurídico sino familiar. Ver a su hermana y a sus sobrinos en esta situación, debe ser muy complicado. Son tragos amargos de la vida difíciles de digerir.
Pero a final de cuentas, el único presunto culpable de todo esto es Nicolás. Ya desde hace rato nos habían comentado de los malos pasos en que andaba. Nos comentaron desde hace tiempo fuentes serias que cada vez que había levantones, asesinatos, extorsiones, etc… todo mundo volteaba a ver hacia “Nico”.
Dicho sea de paso, extraña mucho que en el PRI, el PAN y el PRD estén defendiendo a presuntos delincuentes como Nicolás y Gregorio “N”. Lo de Rogelio es otra cosa, son líos de su pasado marital, pero en el caso de los otros dos, son verdaderas fichitas.
Cuidado, porque el riesgo de meter las manos al fuego por personajes de dudosa honorabilidad, es que se pueden tatemar sus manitas… y la cara… ¡y el cuerpo entero!