Estados Unidos y Gales empataron 1-1 en un partido cerrado en el que hubo más fuerza que jugadas vistosas.
Al minuto 82, Gareth Bale empató el juego con un penal perfectamente cobrado.
Con su aparición en el Estadio Ahmad Bin Ali, al oeste de Doha, Estados Unidos fue el primer equipo de la Concacaf en participar en el Mundial.
Al minuto 35 el cerebro de los estadounidenses, Christian Pulisic, metió un pase filtrado a Timothy Weah, quien colocó el balón en el fondo de las redes.
La primera parte había sido cerrada, con el equipo de las barras y las estrellas con la posesión del balón y llevando el peso del partido.
