Por José Luis Enríquez Ambell
El hecho que acudan y se presenten los titulares de despacho en el H. Congreso del Estado en ocasión de la Glosa por el IV Informe del Gobernador de Veracruz Don Cuitlahuac García Jiménez, es un acto de gobierno de la mayor relevancia, que emana de nuestras leyes y no una actividad menor, mucho menos circense o recreativa.
Sea ante las Comisiones Legislativas Permanentes o el Pleno del Congreso, en este caso es para informar el estado que guardan cada uno de los ramos de la administración pública que están bajo su responsabilidad, el hecho real es que no es un acto o acción distante a la más alta seriedad o dicho de otra forma, no es una kermesse o verbena popular.
La Constitución Política del Estado es quien dispone la comparecencia de los Secretarios de Despacho, como otros Servidores Públicos que tienen a su disposición recursos producto de todos los veracruzanos y mexicanos como son los titulares de los órganos autónomos – con excepción de la UV – y después de la entrega anual del Informe de Gobierno.
Esta forma de “control parlamentario’ y que emana de las normas vigentes en Veracruz no debe ser motivo para una fiesta mal entendida e incluso creo las debería limitar la autoridad competente el que “la celebración” sea seria y no un carnaval dónde hasta bloqueos en las calles y avenidas causan y quizá hasta gastos innecesarios e injustificados, que aún ante la vista y observancia de los que vigilan o deben hacerlo por la actuación de los servidores públicos, no hacen nada por evitarlo o corregirlo, es el caso de las Contraloría Internas de las Dependencias. Es más, hay personal adscrito a funciones en esos órganos internos de control que están cargados al presupuesto de las oficinas a las que se supone revisan y deben ayudar para ser mejor gobierno aportando sus talentos y deber, lo que parecería un pequeño conflicto de interés, pero que no evitaría el cumplir con la tarea.
Faltan varios Secretarios de Despacho por transitar para la Glosa del IV Informe por el recinto del pleno legislativo frente a la Comisión correspondiente, y todos esperamos que no dejen de aportar junto con los diputados lo que en conjunto la población necesita saber y las normas indican cumplir; “rendir cuentas claras y transparentes relativas a todo el universo de obras, acciones y servicios que les compete.”
Las “Compadrecencías” quedan de lado para hacer de la Glosa un acto serio, responsable, solemne y honorable ante nuestro Parlamento Veracruzano.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
Es una tradición más que obligación en términos de responsabilidad que casi todos los Presidentes Municipales en su calidad de Servidores Públicos ofrezcan al final de cada ejercicio un mensaje o informe de labores en medio de un acto y evento de características que va ligado a lo masivo por el número de asistentes que se convocan de todos los niveles y sectores sociales. En ese sentido el Alcalde de Orizaba Don Juan Manuel Díez Franco, se dice tomo la decisión de no “hacer gasto alguno por mínimo que pueda resultar” y se reduciría a entregar al Honorable Cabildo el informe de su primer ejercicio, en la segunda etapa de Municipe.
¡ ES CUANTO !
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