Cada 25 de diciembre en todo el mundo se conmemora la Navidad, fecha que según la Biblia marca el nacimiento de Jesús.
En Belén, la ciudad donde nació Jesús, sigue en pie y todos los años recibe de decenas de turistas que llegan para visitar los santos lugares descritos en la Biblia donde nació el Niño Dios.
Uno de estos lugares es la Basílica de la Natividad, lugar construido justo en la ubicación donde María y José se instalaron para el nacimiento de Jesucristo.
“Y aconteció que estando ellos allí (en Belén), se cumplieron los días de su alumbramiento. Y (María) dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón. Había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño. Y he aquí, que se les presentó un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor; y tuvieron gran temor. Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor. Esto os servirá de señal: hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre.”, dice el relato bíblico de Lucas.
El padre José de Jesús Aguilar Valdés, realizó un recorrido por el interior de esta basílica y explica en un video todos los detalles relevantes.
Al interior de la Basílica de la Natividad se encuentran decenas de artefactos y reliquias que datan de la época de Jesús y los primeros años de fe.
Cuna de Cristo según la tradición cristiana, la ciudad de Belén recibe cada año a miles de peregrinos y turistas para la Navidad, pero que se redujo en las dos últimas ocasiones a causa de la pandemia de covid y las restricciones sanitarias, que complicaron los desplazamientos.
Los peregrinos meditan en la Basílica de la Natividad mientras otros multiplican los selfies, con la cabeza cubierta con gorros rojos y blancos de Papá Noel, a pocas horas de la tradicional misa de medianoche y de los deseos de paz.
