En la SEV se ubican personajes que han afectado a la institución.
Son dos.
Se trata de Armando Cinta, quien antes de llegar a la SEV, laboraba en la Secretaría de Seguridad Pública; pero fue despedido por presunto acoso sexual a compañeras pero como es pariente de Eleazar Guerrero por parte de su esposa , no procedió la demanda en su contra.
Buscó refugio en la SEV, acomodándose en el Consejo Interstitucional Veracruzano de Educación (CIVE), pero como a él le gusta el dinero, de ahí solicitaba buenas cantidades a otras instituciones para eventos deportivos y de ajedrez, dinero que no reportaba a ese órgano consultor.
También lo corrieron del CIVE por supuestas anomalías. Además debe más de 80 mil pesos, porque necesitaba para operar según sus argumentos para las giras de pre y campaña para Nahle.
Presumía tener estrecha relación con la familia del gobernador Cuitláhuac García Jiménez.
Otro personaje que hizo estragos en la SEV, fue Ángel Portilla Salazar, aunque ya no labora, estafó a medio mundo.
Con Alejandro Obcejo quien tenía el puesto de Dirección de Control Presupuestal , pretendían hacer negocios con las cafeterías de las escuelas públicas de la entidad.
Ese proyecto se les vino abajo.
Portilla también pasaba charola con la empresa Asombra que se dedicaba a realizar la construcción de domos a centros educativos. De ellos recibía diez mil pesos mensuales para “asignarles” escuelas.
No solo eso. Se decía protegido por Atanasio García, papá del gobernador
A Ángel Portilla lo corrieron por presuntas anomalías.
No solo eso. Ambos pillos andan comentando entre sus amistades que retornarán a la SEV porque tienen la venia del próximo gobierno para ocupar grandes cargos. ¡Ufff…!
Uffff