El aún alcalde de Papantla, Eric Domínguez Vázquez, supo jugar muy bien sus cartas y sacó gran provecho a su traición al proyecto original que apoyaba hace poco más de un año rumbo a la gubernatura.
Y es que se le recuerda metido hasta el “tuétano” en el grupo de la afrodescendencia pero semanas antes de la definición cambió el rumbo obviamente con temas pactados.
Una de las formas de convencerlo fue de entrada ofrecerle la candidatura de su esposa
Miriam García Guzmán, quien contendió por la diputación local por Morena y hoy despacha en la calle de Encanto en la capital veracruzana.
Y la segunda parte del trato fue un cargo para él en el nuevo gabinete siendo el premio la subsecretaría de Finanzas y Planeación que es la segunda más importante al menos en el organigrama de la dependencia. Le dicen de cariño el “chaparro” pero nunca le podrán decir el “tonto”.