La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró este lunes que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, “nunca habló de la intervención en México” en su anuncio que hizo ayer de que designará a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas cuando asuma el poder el próximo 20 de enero.
“Nunca habló de la intervención en México. Incluso menciona a sus propias agencias hacia Estados Unidos”, afirmó Sheinbaum en su conferencia de prensa, y agregó: “Vamos a trabajar para una buena relación, pero sin engancharse en temas que vulneren nuestra soberanía”.
Sheinbaum criticó a sectores de la oposición por celebrar la posibilidad de una intervención extranjera, comparándolos con los conservadores del siglo XIX que apoyaron la intervención francesa en México. “Somos un país libre, soberano e independiente. Colaboramos, pero no permitiremos una intervención”, afirmó.
Finalmente, expresó solidaridad con Panamá tras los comentarios de Trump sobre el Canal de Panamá, destacando su apoyo al presidente y al pueblo panameño.
Ayer, el presidente electo Donald Trump volvió a acusar a otros países de enviar a Estados Unidos a sus “narcotraficantes” y afirmó que “toda esta red criminal que opera en suelo estadounidense será desmantelada, deportada y destruida”.
Insistió en que México debe frenar el tráfico de drogas en la frontera y, que en un mes cuando tome posesión, declarará a los cárteles del narcotráfico como organizaciones terroristas extranjeras.
Cabe recordar que el sábado en su cuenta en Truth Social, el líder republicano publicó un mensaje en el que advirtió que, de no cumplirse los principios “morales y legales” del acuerdo original sobre el Canal de Panamá, su administración demandará que la vía interoceánica sea devuelta “por completo y sin cuestionamientos”.
En su mensaje, Trump criticó duramente el acuerdo de 1977 firmado por el expresidente Jimmy Carter, que entregó el control del Canal a Panamá.
Según Trump, la transferencia fue concebida como un gesto de cooperación entre ambos países, no para beneficiar a terceros como China, ni para permitir que Panamá impusiera tarifas que calificó de “ridículas” y que, según él, afectan injustamente a la Marina estadounidense y a empresas de su país.