Justicia alternativa en Veracruz: soluciones exprés, dudas permanentes

José Ortiz / EN CORTO

En un abrir y cerrar de ojos, el Congreso de Veracruz ha decidido que era momento de modernizar la justicia con la creación del Centro de Mecanismos Alternativos de Solución de Controversias, eliminando de paso al ya conocido CEJAV. La idea es agilizar los procesos, desahogar los tribunales y, por supuesto, acercar la justicia a la ciudadanía. Suena bien, ¿verdad? Pero, como suele suceder con las decisiones apresuradas, los detalles parecen haber quedado en segundo plano.

El nuevo esquema contempla la posibilidad de que centros privados se encarguen de la mediación, lo que, en teoría, permitiría una mayor eficiencia. Sin embargo, aquí es donde comienzan las preguntas incómodas: ¿quién garantizará que estos centros funcionen con imparcialidad? ¿Cómo asegurarse de que no se conviertan en negocios lucrativos donde el que paga más, gana más? La supervisión quedará en manos del Poder Judicial, pero con tantos temas en su agenda, ¿realmente habrá un control efectivo?

Por otro lado, la accesibilidad es otro tema espinoso. Si bien se habla de soluciones más ágiles y eficaces, es legítimo preguntarse si los sectores más vulnerables podrán acceder a estos servicios sin que el costo se convierta en un obstáculo. La justicia alternativa no debe ser un privilegio para quienes puedan pagarla, sino un derecho accesible para todos.

La certificación de mediadores es otro punto crítico. Al inicio, podrán contar con un sello de aprobación, pero ¿quién garantizará que con el tiempo no se relajen los estándares? Porque una cosa es recibir la certificación y otra muy distinta es mantener un alto nivel de profesionalismo y ética en el largo plazo.

A final de cuentas, esta iniciativa podría representar un avance, pero si no se establecen controles sólidos, solo estaremos trasladando los problemas de los juzgados a un nuevo modelo lleno de incertidumbres. Como siempre, el reto no está en las buenas intenciones, sino en la ejecución.

Habrá que ver si esta justicia exprés no termina siendo solo otro trámite más que deja más dudas que certezas.