Dicen que en el piso 13 de importante torre empresarial de la capital se toman las principales decisiones del gobierno del estado.
En el piso 13, el Señor acuerda asignaciones de obras, adquisiciones, contrataciones, nombramientos de funcionarios, ceses, renuncias inesperadas. Él es el dueño de vidas y destinos, al menos en lo que resta del sexenio.
En el piso 13 se controla todo. El Señor es el encargado de toooodo. SIOP, Sefiplan y Sedarpa son las secretarías que más merecen su atención.
El Señor es casi el Vicegobernador, el gobernador de facto o el secretario sin cartera. Es el asesor sin sueldo, el que “ayuda mucho” a la Señora. Y es finalmente el que manda. A él se le cuadran, a él le rinden todos sus respetos. Él es el del poder real. Y no es misoginia. Es la realpolitik. Ni más, ni menos.






