La Administración Trump debe hacer que el Gobierno de México rinda cuentas ante la aparición de un nuevo caso de infección de gusano barrenador en un ejemplar de ganado vacuno en el Estado de Nuevo León, aseguró una de las principales asociaciones de ganaderos de Estados Unidos.
«Es sumamente preocupante para la industria ganadera de EU que el gusano barrenador… se haya extendido tan al norte de México y ahora se encuentre a sólo 112 kilómetros de la frontera (de EU)», dijo Colin Woodall, presidente de la NCBA, luego del caso detectado en Sabinas Hidalgo en Nuevo León.
«Pedimos al Departamento de Agricultura de EU que siga haciendo que México rinda cuentas y a urgirle que reduzca los movimientos de animales que podrían propagar el gusano barrenador hacia el norte», añadió Woodall ante la preocupación de que de alguna manera pueda cruzar la frontera entre México y EU.
«La velocidad con la que se ha propagado a través de México es un recordatorio de que esta plaga representa una amenaza crítica y urgente para los ganaderos de EU», dijo Woodall en un comunicado.
Aunque ya fueron asignados fondos federales para una planta de producción de moscas estériles en el Estado de Texas para combatir al gusano barrenador, la NCBA pidió también a la Administración Trump agilizar la construcción así como autorizar la aprobación de nuevos pesticidas para combatir la plaga.
Además del anuncio en agosto de una inversión de 750 millones de dólares para construir la planta de producción de moscas estériles en Edinburg, Texas, el Gobierno del Presidente Donald Trump había ya comprometido 21 millones de dólares para modernizar una planta en Metapa de Domínguez, Chiapas.






