Aun cuando parece cíclico, los diputados de izquierda advirtieron que el caso de la legisladora local de Sinaloa Lucero Sánchez pone a los partidos políticos en alerta para perfeccionar sus filtros de selección de candidatos a puestos de elección popular.
El diputado Arturo Santana, del Partido de la Revolución Democrática, sostuvo que la relación de la legisladora con el narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, colocó al Partido Acción Nacional y a otras fuerzas política “en el ojo del huracán”, precisamente en este año en el que se llevarán a cabo elecciones en varias entidades federativas.
El legislador perredista dijo que el presidente nacional de los panistas, Ricardo Anaya, actuó demasiado tarde y con lentitud en el intento de aclarar el caso de la legisladora, pues de su cercanía con Joaquín Guzmán ya tenían conocimiento desde meses atrás y el silencio fue lo que marcó la pauta en ese partido.
Arturo Santana pidió además que el Instituto Nacional Electoral (INE) establezca normas específicas para rechazar o aceptar las candidaturas, incluso independientes, que dejen sentado que los aspirantes a los puestos de elección popular son totalmente ajenos a las actividades del crimen organizado y el narcotráfico.
Asimismo, el diputado del Partido de la Revolución Democrática exhortó a que la Procuraduría General de la República contribuya en este esfuerzo.