Aun cuando se hizo “el pedido” en la administración de Felipe Calderón, y aunque Andrés Manuel López Obrador prometa que lo venderá de llegar a Los Pinos, el punto es que el nuevo avión presidencial Boeing 787-8 Dreamliner, José María Morelos y Pavón, aterrizó a la 1:53 de la madrugada de este miércoles en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
La aeronave sustituirá al TP01 Presidente Benito Juárez, que opera desde 1988, durante el sexenio de Miguel de la Madrid.
Su arribo estaba previsto desde diciembre pasado, pero se retrasó debido a que las obras de remodelación del hangar presidencial aún no habían concluido; pese a que albañiles trabajaban a marchas forzadas.
El nuevo avión presidencial, que costó más de 6 mil 547 millones de pesos, efectuó el mes pasado dos pruebas de vuelo con base en el aeropuerto Lovefield, de Dallas, Texas.
El Boeing 787-8 Dreamliner mide 57 metros de largo por 60 de distancia entre las alas. Tiene una capacidad para más de 240 pasajeros y puede recorrer 14 mil 500 kilómetros sin abastecerse.
De acuerdo con especialista, este tipo de nave puede volar sin escalas desde el AICM hasta París, Londres, Madrid o Moscú por mencionar algunos destinos internacionales.