Fidel y su penosa herencia

El caso de los medicamentos presuntamente apócrifos en los tratamientos de cáncer en niños, es una verdadera bomba que lesiona y ofende a todos.

Por ello, desde el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares continuaran insistiendo en el tema que ya alcanzó para tumbar a Fidel Herrera Beltrán del consulado en Barcelona, después del golpeteo mediático, por el momento, solo a nivel de medios de comunicación.

Se sabe que la cancillería mexicana tuvo especial interés en que se difundiera la renuncia de Herrera Beltrán para deslindarse del escándalo internacional en que se han convertido las múltiples denuncias en contra de Javier Duarte y su mentor.

Fidel es un animal político que sabe medir tiempos y circunstancias. Su rápida acción de salir a contestar toda clase de preguntas en los espacios informativos tiene varios objetivos, el visible es atajar con fuerza la campaña que se le viene de parte de su enemigo, el actual gobernador de Veracruz.

Su reacción, como saben quiénes lo conocen, no obedece solo a desmentir una y otra vez las acusaciones de Yunes Linares, sino que busca treparse a la escena nacional para deslindarse de Javier Duarte, el ahora prófugo y quien representa la más penosa herencia que habría dejado Fidel a los veracruzanos.

Y es que más allá de los presuntos abusos y excesos en varios rubros que se habrían cometido en los dos sexenios anteriores, Fidel fue quien se inventó en Javier Duarte un remedo de representante de una nueva generación de políticos.

Javier, el que alguna vez fue un títere de Fidel dicen, que hasta le cargaba el portafolio, es ahora la más alta definición de la corrupción y el sinónimo de ladrón.

El ahora ex cónsul, pese a contar con un colmillo largo y retorcido no supo seleccionar a quien le heredaría el poder; no pudo identificar que Javier Duarte al sentarse en Palacio de Gobierno iba a enloquecer y a desbordar su insaciable ambición.

Fidel carga como pesada roca en la espalda el fantasma en que parece haberse convertido Javier Duarte; el de Nopaltepec sintió la lejanía del ahora prófugo desde el primer año del sexenio duartista, pero era demasiado tarde, el empoderamiento de un grupo tan compacto como cómplice había echado raíz solo para enriquecerse.

Ahora, toda la suciedad sale a flote, con verdades a medias o mentiras completas, pero lo cierto, es que en esas agitadas olas varios podrían ahogarse, tan solo por haber participado muy de cerca con los que fueron protagonistas de los últimos 12 años de gobiernos priistas en Veracruz.

De frente a la elección municipal de junio próximo, los escándalos, acusaciones y señalamientos en contra de Fidel y Javier, sirven a la perfección para terminar de desaparecer al PRI en Veracruz y los pocos reductos que quedan de lo que fue un partido poderoso, pero que albergo a cuestionados personajes como el prófugo, que dejó una insuperable estela de abusos, excesos y presunto enriquecimiento ilícito.

Ágora

Los “fidelistas” de closet hacen sus apuestas, los más cercanos todavía le ven tamaños para dar pelea, los demás simplemente buscan un buen lugar en gradas para ver desde lejos el “show” en que se convertirá el incesante intercambio de acusaciones. Nadie con peso político lo defiende.

@monicamarena