Los retos de Américo

Américo Zúñiga Martínez llega a la dirigencia estatal del PRI en uno de los momentos políticos más desafiantes, cuando el Revolucionario Institucional tiene como prioridad ganar todo lo que pueda ganar y pasar de la tercera fuerza electoral que le dejó como herencia la más reciente jornada electoral, la del 4 de junio pasado en la que se renovaron las alcaldías y el congreso estatal.
El reto no es sencillo, como tampoco ha sido la tarea de gobernar para los partidos que hoy detentan el poder.
Al priismo veracruzano le viene bien el liderazgo de un político como Zúñiga Martínez que ha probado ser capaz de hacer bien las cosas mientras ha sido funcionario estatal, legislador y recientemente alcalde de la capital del estado.
En sus expresiones hay madurez, deseos de trabajar y convencer. Levantar la moral de los priistas en esta etapa de precampañas y organizarlos es una tarea que sin duda, el exalcalde xalapeño hará muy bien por todo el estado y su arribo a la presidencia del Comité Directivo Estatal llega en buen momento para proyectar las precandidaturas de los Pepes Meade y Yunes.
Mientras tanto, la llegada de Américo al PRI, se acompañó de un discurso que entusiasmó a la militancia y que dejó críticas sustentadas a la realidad que se vive en el estado y que son también expresiones políticas que cuentan.
Pisando fuerte llegó Américo al edificio del PRI y así también ha comenzado a recorrer la entidad para hacer lo que de inicio parece complicado aunque no imposible, recuperar la gubernatura ganar la Presidencia de la República y posiciones en los congresos federal y estatal.