Víctor Hugo Moreno Hernández
Pese a la difícil situación económica, los creyentes hacen un esfuerzo para cumplir con la tradición de vestirlos.
En vísperas de la celebración por el Día de la Candelaria, los puestos y locales dedicados a la venta de ropones y trajes para Niños Dios, lucieron con poca presencia de clientes, a pesar de estar en los días donde mayores ventas se registran.
Así lo refirieron los dueños y trabajadores de los establecimientos entrevistados durante un recorrido en el mercado Jauregui del Centro Histórico de Xalapa, en el que detallaron que la emergencia sanitaria derivó en una reducción de sus ventas hasta en un 80 por ciento.
Tal es el caso de la Sra. Lourdes Romero quien informó que este año decidió invertir menos a su negocio, ante el riesgo del rezago en sus productos, puesto que a comparación de este 2021, durante el año pasado los fieles católicos llegaron a solicitar los atuendos con mayor costo, y ahora, ha sido todo lo contrario.
“Hace un año compramos más ropa, teníamos más lleno todo, había más mercancía de todos los compañeros, pero este año si está muy bajo. Hace un año, incluso, todos los compradores pedían de precios altos y ahora buscan lo más económico”, dijo.
En esta misma intervención, Lourdes Romero mencionó que, pese a que esperarían a que sus ventas subieran en estos días previos al 2 de febrero, el cierre de los locales probablemente no les ayudaría, sin embargo, se mantendrían positivos.
“Estamos vendiendo, gracias a Dios, vamos saliendo, aunque sea de poco a poco, vamos a esperar estos días que son los más fuertes, yo creo que igual va a afectar el cierre de los locales y calles”, añadió.