Ayer un grupúsculo de manifestantes bloqueó la Avenida Juan de la Luz Enríquez de esta ciudad capital. Los revoltosos eran comandados por los hermanos Adolfo y Topacio Citlali Ramírez Hernández.
Cabe destacar que Adolfo en días pasados conducía un vehículo en la modalidad de taxi; sin embargo, elementos de Transporte Público le marcaron el alto, para revisar que su documentación estuviera en regla.
Sin embargo, con actitud altanera y prepotente, trató de amedrentar a los uniformados, quienes sólo le pedían los documentos pertinentes para poder conducir el auto de alquiler.
Es preciso señalar que no es la primera vez que este sujeto es detenido por alterar el orden público. En Junio del año pasado fue detenido por elementos policíacos para una revisión de rutina, cuando circulaba de manera temeraria en un vehículo con logotipos “oficiales” de la Junta de Mejoras del Gobierno del Estado, en la calle Gildardo Avilés, de la colonia Rafael Lucio.
En esa ocasión, también en tono altanero intentó ofender a los policías; sin embargo, la autoridad lo detuvo y al tratar de oponerse, llegaron sus familiares para ocultar un pistola que tenía al interior del vehículo y de la cual no portaba documentos.
Al revisar la unidad en la que se trasladaba, los oficiales se percataron que el vehículo estaba dado de alta como unidad en la modalidad de taxi, por lo que incurrió en un delito y fue llevado a los separos del Cuartel de San José.
En redes sociales, también fue cuestionado por organizar un concurso de altares en noviembre pasado, haciendo la convocatoria a través de la página de la Junta de Mejoras.
Usuarios se quejaron que el concurso fue una estafa, pues se inscribieron para participar en el evento, y nunca entregó los premios, a pesar de ello se quedó con el dinero de las personas que se inscribieron, por lo que lo acusaron de fraude.
Pero el verdadero “cerebro” de esta dupla es la revoltosa Topacio Citlali Ramírez Hernández, quien el12 de diciembre de 2016, luego de permanecer bloqueando ocho horas la carretera Xalapa-Veracruz, la líder de la Alianza Revolucionaria Constitucional (ARCO), y algunos integrantes de la organización fueron desalojados y detenidos por la Policía Estatal.
Desde las 8 de la mañana de ese día, la Topacio Citlali se manifestó en la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) donde exigía plazas magisteriales y despensas.
Pero durante el diálogo con el personal de la SEV, arremetió contra los trabajadores, golpeó e insultó, mientras que ordenaba a su gente que cerraran ambos carriles frente a la dependencia estatal y los centros comerciales.
La policía acudió sin toletes y sin agresiones para proceder a la detención de la mujer y dos de sus integrantes, quienes además de afectar la vialidad fueron denunciados de manera pública que cobraban de 50 a 200 pesos a los conductores para dejarlos pasar.
Las mujeres policías fueron quienes actuaron en la detención, pero al oponerse tuvieron que pedir más refuerzos policiacos para ser cargada Topacio Citlali y ser subida a la batea de la patrulla desde donde pedía auxilio e invocaba a Jesucristo.
A decir de algunos conductores, la acción de la policía estuvo correcta, ya que los manifestantes estaban agresivos y ponían en riesgo a todo aquel que pasara por esta zona del bloqueo.
Minutos después, los integrantes de ARCO se trasladaron hacia la calle Juan de la Luz Enríquez donde cerraron la vialidad bajo el argumento de haber sido intimidados por los elementos de seguridad.
Esperemos que las autoridades frenen los abusos de la Topacio Citlali y su carnal, que los encarcelen, para que sirva de escarmiento; que quede claro que nadie puede estar por encima de la ley y bloquear calles cada vez que se les ocurre, en perjuicio de los demás ciudadanos.