Por Yair Ademar Domínguez *
¡Que la fuerza de MORENA se quede aquí!
Han arreciado en estos últimos días los ataques en contra del Movimiento de Regeneración Nacional y de nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador. Son los estertores, la respiración propia de la agonía del régimen de los conservadores, de un sistema de corrupción que saqueó al país, los lobos del pueblo mexicano que hoy quieren regresar vestidos de oveja.
Piensan que con sus ataques van a detener el proyecto de transformación que está en marcha. Están muy equivocados. A este movimiento que impulsa ya saben quién, nadie lo detiene. En las urnas, el próximo 6 de junio, las mexicanas y los mexicanos, los veracruzanos, saldremos a la calle para renovar la esperanza de este proyecto de nación.
¿Por qué es importante seguir transformando Veracruz y defender la esperanza? Me lo ha dicho don Anselmo en Las Choapas, doña Sofía en Coatzacoalcos; don Armando, en Otatilán; el joven Rodrigo, en el puerto de Veracruz; don José en La Antigua; don Sebastián en Poza Rica; doña Juanita en Pánuco y doña Mari en Tampico Alto, porque nunca la gente, el pueblo, había estado arriba de la pirámide de la política en nuestro estado y país.
El pueblo, utilizado como carne de cañón, siempre ha sido el pretexto de la política, pero como señuelo, como carnada para la invención y aplicación de presuntos programas sociales que sólo servían para enriquecer a unas cuantas familias. Hoy las niñas y los niños, los jóvenes, los emprendedores, los adultos mayores reciben directamente recursos económicos para la transformación de sus vidas.
El antiguo régimen los utilizaba, los manipulaba, no les daba su lugar en la historia y se convertían en una cifra engañosa, para dejarlos ahí, sumidos en la pobreza y el abandono, mientras ellos se llenaban los bolsillos y resolvían el problema de sustento de su familia por dos o tres generaciones.
Este sábado fui testigo de una caravana de militantes de Morena que se realizó en Xalapa y he estado en marchas y manifestaciones en Otatitlán, en Coatzacoalcos y en diversos puntos del territorio veracruzano. Me acerco a la gente, dialogo con ellos, los cuestiono y en todas las respuestas y en todos los rostros veo la esperanza, el ánimo, la convicción de que están sumados a un movimiento legítimo, histórico, que está cambiando la vida de este país.
Con esta esperanza estamos logrando el cambio que nos mueve. Juntos, unidos, hombro con hombro, estamos haciendo historia en Veracruz y en todo México. Yo en lo personal me siento muy orgulloso de ser parte de este movimiento y me llena de mucha esperanza ver el ánimo que contagia, de miles de veracruzanos que están convencidos que esto ya no lo para nada.
Los partidos políticos que han representado la mafia del poder, que durante años sumieron a nuestro país en crisis interminables, no tienen cara para presentarse ante el electorado.
En Veracruz juntos estamos haciendo historia, juntos estamos consolidando la transformación. Este es el momento de expulsar a los malos gobiernos y la corrupción. Tenemos que extirpar esos tumores, tenemos que sacar a los traidores, que ya no estorben los conservadores, a todos aquellos que saquearon nuestro país.
Queremos ¡que la fuerza de MORENA se quede en Veracruz y en todo México! Queremos que la esperanza llegue a todos los rincones. Juntos estamos haciendo historia, porque ya estamos hartos de la corrupción. Por ello defendemos la esperanza contra la mafia de la corrupción.
Ya estuvo bien con el PRIAN y con sus transas, es la hora de defender la esperanza, porque nuestra alianza es con el pueblo. Queremos que llegue a todos la transformación y nuestra única consigna es ¡Que la fuerza de MORENA se quede aquí!