Siembran terror y zozobra guaruras de candidata de Morena en Tlalnelhuayocan

Lo comenta el muy informado columnista Pablo Jair Ortega:

“Por otra parte, en Tlalnelhuayocan anda la población con temor porque la candidata del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Fanny Muñoz, trae un grupo de choque que anda sembrando miedo con intimidaciones y amenazas.

Llama la atención que este grupo trae una logística y coordinación tipo policiaco; incluso se habla de armas.

Y es que Muñoz es hija de Luis Alberto Muñoz López, dueño de Grupo Centauro Veracruz, una empresa dedicada a la seguridad privada. El mencionado fue escolta jefe de escoltas en el gobierno de Miguel Alemán Velasco y tuvo cargos dentro de Seguridad Pública, donde hizo mucho dinero.

Una vez asentado en Tlalnelhuayocan (municipio conurbado con Xalapa), Muñoz López mandó a hacerse una mansión en el ejido Rancho Viejo, donde también se metió a invadir a los vecinos, hasta que por órdenes de un tribunal lo pararon.

Es curioso, pero pese a todo lo que según conoce del ámbito policiaco, se sabe que hace unos años le secuestraron a su hija, la hoy candidata.

Lo más reciente que se ha sabido de las operaciones de este grupo es que acosa y persigue a simpatizantes de otros partidos, haciéndole a la “succionada” con radios Kenwood a todo volumen para apantallar a la gente del pueblo

Pero comentan también que van tan mal en la campaña, que la madrugada del sábado hubo un pleito fuerte en el equipo de la candidata, y llegaron hasta romperle a pedradas los cristales de su casa a uno de los coordinadores.

Un personaje que señalan como incitador de la violencia es identificado con el apodo de “Barba Azul”, quien presiona a los colaboradores de la candidata y manda a hostigar a los adversarios. El tal “Barba Azul”, según comentan en el pueblo, es un secreto a voces que le gusta hacerle a esos que se creen Zetas, pero que además es señalado por presuntamente cometer abigeato en años anteriores; luego desapareció y nuevamente se le ve en la campaña morenista.

Vaya fichitas en Zongolica y Tlalnelhuayocan: un pinche cínico y un aspirante a malandro”.