EnCortoSinCortes | “EL BUKANAS”, ¿DETRÁS DEL SECUESTRO DE DIEZ PERSONAS EN ACULTZINGO?

José Ortiz Medina / EN CORTO… SIN CORTES

El miércoles por la noche, en la comunidad de Vaquería, municipio de Acultzingo, un comando secuestró a diez individuos.

En un principio se creyó que los plagiados eran ingenieros de la compañía Vías Férreas de Tehuacán, pero esa versión fue desmentida por la firma Ferrocarriles del Sureste.

En tanto, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez informó que no existe denuncia sobre ese ilícito.

Los secuestrados se transportaban en una camioneta que luego fue hallada en un camino de terracería, de la comunidad Vaquería.

Fuentes policiacas refieren que esa zona en la que dichas personas fueron privadas de la libertad es territorio controlado por Roberto de los Santos de Jesús, alias “El Bukanas”, líder del huachicoleo.

Antes de que José Antonio Yépez Ortiz, “El Marro”, líder del cártel de Santa Rosa de Lima, acaparara el foco mediático como “huachicolero” más buscado del país, otro “chupaductos” ostentaba dicho lugar en la vida criminal del país.

Se trata de Roberto de Los Santos de Jesús, mejor conocido como “El Bukanas”. Su peligrosidad es tal que sobre sus hombros pesa una recompensa de 5 millones de pesos.

“El Bukanas” fue Policía en Veracruz, donde utilizaba su placa para robar combustible. Además, es señalado de tener vínculos con “Los Zetas”.
Sin embargo, se desconoce de qué fracción procede Roberto de Los Santos de Jesús, pues dicha organización criminal está fragmentada en el cártel del Noreste y “Los Zetas Vieja Escuela”.

Las actividades delictivas de “El Bukanas”, así como sus vínculos con “Los Zetas”, fueron descubiertos en 2014, cuando en un operativo, militares entraron en un rancho donde entrenaban sicarios en la Sierra de Agua en los Cumbres de Acultzingo.

Del operativo, Roberto de Los Santos de Jesús escapó, pero los militares capturaron a varios de los “aprendices”, de entre 17 y 25 años, quienes eran enseñados a “tablear” víctimas, torturarlos en fosas de aguas residuales, utilizar armas y a lesionarlos en celdas de castigo.

Él y su banda de “huachicoleros”, operan principalmente en Veracruz y Puebla.

El portal La Silla Rota refiere que la mano derecha de “El Buckanas” es su hermano Saúl de los Santos de Jesús, apodado como “El Fósil”, quien “regresó” de la muerte.

El 21 de junio del 2017, en un operativo conjunto, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Puebla, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Secretaría de Marina (Semar) protagonizaron un enfrentamiento con “huachicoleros” en la localidad de Telpatlán, en Vicente Guerrero.

Estos “chupaductos” formaban parte de la banda de “El Bukanas”, incluso los hermanos de los Santos de Jesús se encontraban en el enfrentamiento. Varios de los delincuentes resultaron heridos, más cuatro muertos y un elemento de la Semar abatido.

Tras el enfrentamiento, donde “El Bukanas” y “El Fósil” escaparon, se reportó el plagio de una pareja identificada como Eusebia Hernández López y Fortino Andrade Martínez.

Eusebia trabajaba como enfermera en una unidad del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), los criminales la plagiaron para que curara a los heridos. Cinco días después, la pareja apareció asesinada, maniatada y con signos de tortura.

Luego del incidente, autoridades estatales aseguraron que “El Fósil” murió como consecuencia del enfrentamiento. Sin embargo, casi un año después de haber dado por muerto a Saúl de los Santos de Jesús, Manelich Castilla, entonces Comisionado General de la Policía Federal, informó en su cuenta de Twitter que Saúl había sido capturado. El “huachicolero” había vuelto de la muerte.

Las dos principales cabecillas de la banda de “El Bukanas” que operan en Puebla son Ruselin o Ruselbi Vargas Hernández, apodado como “El Ruso”, y Gustavo Adolfo Jiménez Martínez, conocido como “El Vieja”, con centro de operaciones en Palmarito Tochapan.

“El Ruso” y “La Vieja” estarían detrás del enfrentamiento entre “huachicoleros” y militares sucedidos en mayo del 2017, en Palmarito, que dejó un saldo de 10 personas muertas, entre ellas cuatro soldados.

Quien también era pieza fundamental en la estructura criminal de “El Bukanas” era Antonio Valente Martínez Fuentes, alias “El Toñín”, quien pasó de ser un joven campesino a un “millonario” del “huachicol”, según medios locales de Puebla.

Sin embargo, la ruptura entre “El Bukanas” y “El Toñín” vino luego de un malentendido por falta de pagos, convirtiéndose este último en un “chupaductos” independiente.

“El Toñín” ha estado en la mira de la opinión pública pues tiene familiares dentro de la política, su hermano Alejandro Martínez Fuentes ganó en junio del año 2018 la alcaldía de Quecholac, Puebla. Esto significó que varios de los funcionarios de dicho ayuntamiento trabajaran para “El Toñín”.

Otro de los hermanos de “El Toñín”, Marcelino Martínez Fuentes, también forma parte de su estructura criminal, así como demás primos, tíos y sobrinos.

El jefe de sicarios de Martínez Fuentes es Ángel Vázquez de Jesús, “El Cuije”, quien fue herido en un enfrentamiento, hospitalizado, dado de alta, detenido e ingresado al penal de Tepexi de Rodríguez en 2017.

“El Toñín”, considerado el principal “huachicolero” del llamado “Triángulo Rojo” en Puebla, que conecta los municipios de Tepeaca, Palmar de Bravo, Quecholac, Acatzingo, Acajete y Tecamachalco, por donde pasan ductos de Pemex.

Los “huchicoleros” ligados con “Los Zetas” han protagonizado disputas por el robo de combustible en Puebla y Veracruz, principalmente con el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), así como otras bandas de “chupaductos” locales.

Puebla y Veracruz son dos de los estados con más tomas clandestinas de combustible, según informes de Petróleos Mexicanos (Pemex).

En territorio poblano, tan sólo en 2018, se reportaron 2 mil 72 tomas clandestinas colocándolo en la segunda entidad con más casos del país.

Mientras que la entidad veracruzana, fue el quinto estado con mayor número de tomas clandestinas de combustible registradas ese mismo año, sumando mil 538.

En septiembre de 2020 algunos medios nacionales revelaron que “El Bukanas” se alió con una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para controlar los límites de Puebla con el estado de Veracruz.

Según información de la Fiscalía General de la República, existen investigaciones que llevan a identificar que la célula del CJNG que ingresó por el municipio de Acajete y que tenía presencia en la zona terminó acordando con “El Bukanas” para tener acceso libre a los municipios que controla desde Cañada Morelos, en Puebla, hasta Acultzingo, en Veracruz.

Es importante decir que la extensión del CJNG en estados del centro del país ha sido documentada desde 2017 por estudios de inteligencia nacional sobre los grupos delictivos que se encuentran en el territorio nacional.

Al respecto, el 9 de septiembre, El Universal publicó que el CJNG tardó estos tres años en penetrar seis entidades del centro del país con células operativas entrenadas en Puerto Vallarta o alianzas con grupos locales. Así fue que llegó a estados como Puebla, Morelos, Estado de México, Ciudad de México, Hidalgo y Querétaro.

El CJNG mantiene algunos grupos en los municipios poblanos de Palmar de Bravo, Cañada Morelos donde eminentemente tiene el control “El Bukanas” pero según la información de estudios de inteligencia federal, también tiene presencia en la ciudad de Puebla, San Andrés Cholula y en San Martín Texmelucan.

RECORTES… PECARÍAMOS DE ingenuos si creyéramos que en reciente reunión de Palacio Nacional entre el Presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Cuitláhuac García Jiménez sólo se abordó el tema del Tren Ligero de Xalapa. Hay la bien fundada sospecha de que en la charla -teniendo como mudos testigos los retratos de Adolfo Ruiz Cortines y Adolfo López Mateos- saltaron otros tópicos como la detención de Rogelio Franco, y la afrenta del chamaco inmaduro, el famoso ChiquiFer, que osó insultar al mandamás en el estado de Veracruz. El mismo que durante la campaña de 2018 llamó “viejo guango” a quien ahora se sienta en la silla presidencial. Lo ha dicho el mismo AMLO: ni perdón ni olvido, y acaso ese apotegma también se sigue al pie de la letra en estas tierras veracruzanas. ¿Se pasará por alto la diatriba? Por supuesto que no. Jamás. Ese desliz verbal claro que tendrá consecuencias. Derivado de esa lengua suelta es que ya cayó uno -quien es uno de los alfiles del ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares- y está en el Cereso de Amatlán. Y caerán más. De eso ni duda cabe. ¿Qué rodarán más cabezas de peces aún más gordos? Es probable, muy probable. Los prolegómenos de una sucesión anticipada ya se están sintiendo en Veracruz, por lo que ya desde ahora vemos una encarnizada lucha, cuerpo a cuerpo. Morena no está dispuesto a soltar el poder en 2024, y los comicios de este año serán la antesala de la madre de todas las batallas. Mucha agua escurrirá debajo del puente de aquí al 6 de junio, y aún mucho después de esa fecha. Más cosas extraordinarias e inéditas veremos. Se jugará el todo por el todo. El oráculo vaticina un horizonte borrascoso, aguas agitadas en el mar. El grito desconsolado de los perdedores ya se escucha. Las trompetas del Apocalipsis político ya afinan su atroz melodía.