El regreso a clases en la escuela primaria Nicolás Bravo del Puerto de Veracruz fue suspendido, debido a que el plantel todavía enfrenta problemas de aguas negras en su interior.
Aunque los padres de familia y alumnos llegaron puntuales a la institución educativa, se vieron obligados a regresar a sus domicilios.
Se trata del inmueble que el año pasado fue denunciado por los padres de familia y maestros debido a que enfrenta un problema de fuga de desechos insalubres; incluso realizaron una manifestación sobre la avenida JB Lobos exigiendo mejor infraestructura.
El inmueble tiene dirección en Eje Uno Sur, esquina Laguna de Mandinga.
Y es que la fosa séptica donde se acumulan los desechos, ya llegó a su máxima capacidad, provocando que las aguas negras broten hacia la superficie; el excremento que sale de la fosa séptica se mezcla con el agua potable del pozo que suministra a la escuela, pues ambos contenedores se encuentran separados sólo por una división no mayor a 15 centímetros.
Norvin Espíndola Cruz, director de la escuela, informó que la Dirección de Espacios Educativos ya les autorizó la construcción de un nuevo aljibe, cuya construcción a la fecha lleva un 40 por ciento de avance.
No obstante, mencionó que mientras el nuevo pozo de agua potable queda concluido y para evitar poner en riesgo la salud de los 255 estudiantes, se tomó la decisión de suspender las clases de este jueves.
La mañana de este jueves, alrededor de las 08:00 horas, los padres de familia y profesores sostuvieron una junta donde se definió que las clases se reanudan hasta el próximo lunes.
En base al calendario escolar de la Secretaría de Educación Pública (SEP), este jueves siete de enero habrían de reanudarse las clases tras el periodo vacacional decembrino, sin embargo, en la Nicolás Bravo no fue así.
