Debido a la crisis económica que se registra en las familias de la región, ésta genera que la compra de carne de res haya caído entre 40 a 45 por ciento, mismo que se refleja en las carnicerías y venta del producto en el Rastro Municipal.
De acuerdo con el productor y ganadero Ángel Mendoza, los productores de carne se ven seriamente afectados en sus ventas, tanto que tuvieron que desplazar la mano de obra.
“Se está prolongando el costo del ganado, y eso que no tomamos en cuenta la merma y la falta de circulante, pero también nos pega en la caída del consumo del lácteo, así como con el consumo cárnico”, expuso.
Motivo por el cual, consideró, que con ello se ven varias afectaciones, “no sólo es a inicios de febrero sino también se viene Semana Santa y se va a sentir el rezago del consumo del producto”.
Igualmente, reconoció que se tienen pérdidas y siempre a inicio de año, los insumos alimenticios se incrementan, “realmente no sabemos y, desafortunadamente, tenemos que contratar a médicos veterinarios especializados en nutriología para que nos ayuden a coordinar el tema”.
Asimismo, comentó que todos los productores se están perfeccionando para poder seguir vendiendo el producto de la carne.
También que no sólo el tema bovino se ha visto seriamente afectado en sus ventas sino el lácteo, “muchas personas están en el tema de gallina ponedora, de apicultura, muchos están esparciendo sus mercados”.
Al cuestionarle sobre la posibilidad de una mejoría en las ventas, aclaró que “quiero pensar que a finales de marzo se verá una mejora en el mercado del consumo; ojalá, y el gobierno, tanto federal y estatal, nos apoyen, porque si apoyan al campo, México será otro país”.