Casi a la par del sorpresivo anuncio de que el abogado Marco Antonio del Toro Carazo dejaba la defensa jurídica del ex gobernador veracruzano Javier Duarte de Ochoa, se dio a conocer que el proceso lo llevará Ricardo Antonio Sánchez Retana.
Pero resulta que este jurisconsulto es el mismo que lleva la defensa de otro ex gobernador priista, el chihuahuense César Duarte, a quien precisamente acaba de obtenerle un desistimiento de ejercicio de acción penal por parte de la Procuraduría General de la República por los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita, defraudación fiscal y delito bancario.
Además, Sánchez Retana defendió con anterioridad al general Tomás Ángeles Dahuare, quien fue acusado de tener nexos con la delincuencia organizada, acusación de la que la PGR terminó desistiéndose también.
Por lo visto al abogado le gustan los casos difíciles y las “causas perdidas”. Y la del veracruzano vaya que encaja en estos parámetros. ¿Le irá a Javier tan bien como a César? Ya veremos.
