El senador de Acción Nacional, Julen Rementería, afirmó que la llegada de médicos cubanos que auxiliaron en México contra la Covid-19 constituyó un fraude y que las y los doctores de la isla no estaban titulados. Sin embargo, la afirmación es imprecisa y el Ministerio de Salud de Cuba también tiene otros datos.
“Pagaron 255 millones de pesos para que 585 extranjeros cubanos sin estudios vinieran a hacerse pasar por médicos, cuando no lo son, y a tratar pacientes mexicanos graves y no graves en plena pandemia”, dijo el legislador blanquiazul.
Efectivamente, documentos comprueban que en abril de 2020 la Secretaría del Bienestar transfirió al gobierno capitalino 239.5 millones de pesos bajo el concepto “Transferencias para gobiernos extranjeros. Servicios Profesionales” y también por dos partidas más, una para hospedaje y alimentación por 14.8 millones de pesos y otra de 1.4 millones por el mismo concepto pero en 2021.
A su vez la administración de Sheinbaum dispersó esos recursos en dos operaciones que se comprometió a pagar en mayo y diciembre al ministerio de Salud de Cuba, una por 135.8 millones de pesos y otra por 103.6 millones.
Hasta ahí la aritmética cuadra y dentro de las cláusulas del convenio no figura la responsabilidad de México de vigilar que ese monto pase de las arcas del gobierno cubano a las y los médicos.
Rementería indicó que pidieron a Migración, IMSS, ISSSTE e incluso a la Comisión Nacional de Arbitraje Médico documentos que acreditaran las licencias profesionales de las y los 585 médicos cubanos y que las autoridades mexicanas indicaron que eso no era de su competencia.
Las y los médicos que llegaron al país forman parte de la brigada del Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias “Henry Reeve”, mismas que tienen 16 años de historia y que durante la pandemia han tenido presencia en 40 países enviando más de 5 mil profesionales.
De las y los médicos cubanos hay información pública del Ministerio de Salud que no aparece en la declaración de Rementería; por ejemplo, que la brigada que llegó en diciembre estaba conformada por 134 especialistas en medicina general Integral y cinco de otras especialidades, 20 licenciados en Enfermería y un electromédico.
“Los colaboradores atendieron mil 283 pacientes sospechosos y confirmados al SARS-CoV-2, de ellos fueron ingresados 913 y egresaron 833; además realizaron 150 mil 077 procederes de enfermería, se lograron salvar 699 vidas y se rehabilitaron 809 pacientes”, indicaron las autoridades cubanas en informes públicos.
Los nombres de la mayoría de las y los médicos son desconocidos, pero hay declaraciones por ejemplo de Ibrahim Espinosa Fernández, licenciado en Enfermería, que estuvo en México y dijo que reconoció el cariño y respeto que siente ese pueblo por la Isla y principalmente por sus profesionales de la salud.
De la brigada que arribó a principios del año pasado el Ministerio de Relaciones Exteriores indicó que se conformó de 96 médicos y enfermeros, atendió a 441 pacientes sospechosos o confirmados con el SARS-COV-2, de ellos fueron ingresados 167 y egresados 139. “Realizó 43 mil 861 acciones de Enfermería y 159 procederes invasivos; rehabilitó 123 pacientes y efectuó mil 213 capacitaciones en Bioseguridad”.