La diputada presidenta de la Comisión de Salud del Congreso del Estado, Gladys Merlín Castro, presentó una iniciativa de reforma al artículo 75 de la Ley de Salud para que los optometristas cuenten con título profesional o certificado especializado para prestar sus servicios.
“El objetivo principal de esta iniciativa de que se incorpore en al artículo 75 de la Ley de Salud del Estado, a la optometría, es con el objeto de hacer referencia de manera expresa a las actividades profesionales en el campo de la optometría, lo cual tendría como efecto establecer que para su ejercicio se requiere que los títulos profesionales o certificados de especialización hayan sido legalmente expedidos y registrados por las autoridades educativas competentes”.
En la exposición de motivos, la legisladora señala que la Asociación Mexicana de Facultades, Escuelas, Colegios y Consejos de Optometría, A.C., señala que en nuestro país el 43.24% de la población, es decir más de 48 millones de personas, requieren de servicios optométricos en México.
Asimismo dicha Asociación señala que existen cerca de 3 mil optometristas certificados, esto supone que alrededor de 12 mil ópticas de las15 mil que se estima que hay en México no tienen el respaldo de un optometrista titulado.
En el Estado de Veracruz existe un vacío legislativo con respecto a la prestación de servicios de salud visual, es decir, no está contemplado el ejercicio profesional de los optometristas. La mayoría de los exámenes visuales son realizados por personas sin documentación que avale su preparación profesional.
Debe ser preocupante la situación del ejercicio de la optometría en nuestro Estado, por personal con poca o ninguna preparación, pues pone en peligro la salud visual de las personas.
Existen una gran cantidad de ópticas que ofrecen exámenes de la vista “gratuitos” o por “computadora”, y lentes económicos, que no están regulados ni supervisados, y por lo tanto, quienes ofrecen dichos servicios, no cuentan con preparación profesional; algunos aprendieron en la práctica lo más elemental y al poco tiempo ya están haciendo exámenes de la vista.
Consecuentemente, al no haber estudiado en una escuela profesional, no tienen los conocimientos necesarios para realizar un diagnóstico adecuado, no saben cómo detectar una patología ocular o enfermedad, que provoca de inicio, la mala visión; por lo tanto, pueden prescribir lentes que no corregirán el problema, por el contrario, lo agravarán, y en algunos casos, como en el caso de la diabetes, que al no ser diagnosticada, atendida y controlada oportunamente, con el tiempo, puede causar Retinopatía Diabética, que si no es detectada a tiempo, puede conducir a la ceguera, como lamentablemente, ya ha sucedido.
La prevención y detección de vicios de refracción en niños y adolescentes, es muy importante, ya que por la mala visión, pueden ser considerados malos estudiantes, además, las posibilidades de mejorar considerablemente la capacidad visual, son muy elevadas, si se detectan y corrigen a temprana edad.