A los mexicanos les falta indignarse más para acabar con la corrupción: Denise Dresser

¿Qué nos pasa qué no logramos tener la suficiente indignación o capacidad de acción colectiva?, preguntó la politóloga y escritora mexicana Denise Dresser al hacer una remembranza de todos los casos de corrupción que se han destapado durante el actual sexenio del Gobierno Federal y donde no ha habido actuar de parte de las autoridades.

Durante la conferencia que ofreció en la IX Asamblea Estatal de Constructores del Estado de Veracruz con sede en el WTC de Boca del Río subrayó que en el país existen casos pendientes donde se ha demostrado la corrupción que vincula a altos funcionarios de lo tres niveles de gobierno -incluido el propio presiente Enrique Peña Nieto con la famosa Casa Blanca- y a pesar de esto, los mexicano no salen a las calles a exigir un alto a esta situación.

El mayor mal de la justicia en México es la corrupción que deja impune los delitos que cometen quienes integran las altas esferas de la política en el país.

Asimismo, recordó el caso de OHL en el Estado de México, donde incluso se habló de sobornos a magistrados y, a pesar de esto, los mexicanos siguen quietos.

Igualmente, consideró que esa ha sido una de las grandes diferencias con otros países hermanos de Latinoamérica donde los ciudadanos tomaron las calles hasta encontrar solución a los actos de corrupción como fue el caso de Guatemala y Brasil.

«La diferencia con México, en primer lugar, es que en Guatemala y en Brasil marcharon millones de personas, ¿qué nos pasa qué no logramos tener la suficiente indignación o capacidad de acción colectiva? Y en segundo lugar es que los escándalos en México no tienen consecuencias en los tribunales», dijo.

Dio otros ejemplos de casos mexicanos donde al ser detectados los casos de corrupción lo que hacen los funcionarios del gobierno, en vez de actuar contra ellos, los «premian» y les dan otros cargos o, simplemente, los retiran de la escena pública por un tiempo.

«Aquí se premia en lugar de castigar, aquí se asegura la longevidad política en lugar del exilio político», finalizó.