Enfermeras del CEM exigen destitución de su jefa de área «por intransigente e insensible»

Con la colocación de una manta en la entrada principal del Centro de Especialidades Médicas (CEM), «Dr. Rafael Lucio», personal de enfermería exigió a la Secretaría de Salud (SS), la destitución de la jefa de dicha área, Judith Guerrero Sánchez, a quien acusan de intransigente e insensible con los trabajadores que prestan sus servicios en el referido nosocomio.

Luego de las 10 de la mañana, enfermeras y enfermeros representados por el Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud y Asistencia (Sntsa), salieron a la explanada del hospital para expresar su inconformidad, ante lo que ellos llaman un abuso de autoridad, prepotencia, hostigamiento, despotismo, malos tratos y menoscabo de los derechos laborales por parte de la funcionaria de confianza.

En voz de Carlos Sarmiento, delegado sindical de la Sección 26 del Sntsa, Guerrero Sánchez violenta las condiciones generales de trabajo, «trastocando el ambiente laboral en prejuicio de los trabajadores y pacientes», algo que de acuerdo con sus palabras, conocen las autoridades de la SS desde hace varios meses, «por lo cual solicitamos su inmediata destitución de manera irrevocable».

En ese sentido, aseguró que por ahora colocarán la manta, como un primer paso en la demanda de remoción de la jefa de Enfermería, por lo que si hoy no reciben una respuesta satisfactoria a la demanda, amenazó con acciones más contundentes, pues el 35 por ciento del personal del CEM pertenece a esta área.

Sarmiento dijo que Judith Guerrero tiene aproximadamente tres años ocupando este puesto, tiempo durante el cual ha tenido las mismas actitudes hacia las enfermeras y enfermeros, sólo que hasta ahora es que estos decidieron comentar la situación y por ello es que reciben el respaldo de sus líderes gremiales.

«Los trabajadores son los que llevan la voz en este sentido y son los que nos han solicitado el respaldo y apenas hoy buscaron este respaldo de manera completa», apuntó en sus palabras al decir que no existe un reglamento que aplique sanciones a un trabajador cuando incurran en estas actitudes, principalmente porque la denunciada es personal de confianza.