El gobierno destinó el año pasado 407 mil 894 millones de pesos para el pago de intereses, comisiones y demás gastos por la deuda pública, monto 6.5% superior a los 382 mil 935 millones de pesos que desembolsaron 11 secretarías y tres ramos generales contra la pobreza.
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el costo de las obligaciones financieras como porcentaje del gasto total del sector público tuvo en 2015 su participación más alta desde 2009.
Lo anterior significa que el sector financiero y los inversionistas, tanto nacionales como extranjeros que son acreedores de la deuda pública, se llevaron 8.3% del gasto público total
en 2015.
El 8.3% —que representa las ganancias de los acreedores sobre el capital que prestaron al sector público— es superior al 7.8% del gasto total para mejorar las condiciones de 55 millones de mexicanos que sobreviven con carencias sociales y económicas.
Otro comparativo: respecto de 2014, el gasto en combate a la pobreza creció 1.2% real anual en 2015, en tanto que lo ejercido en el costo financiero de la deuda aumentó 14.8% real en el mismo periodo.
La información de la Secretaría de Hacienda refiere que el presupuesto para apoyar a las personas con algún tipo de carencia social o bien económica presentó un ajuste a la baja respecto de lo aprobado por el Congreso de la Unión en 2015.
COMBATE A POBREZA, EN SEGUNDO PLANO
El sector público federal erogó el año pasado 407 mil 894 millones de pesos en intereses, comisiones y demás gastos por la deuda que actualmente tiene contratada —lo que se conoce como costo financiero de la deuda pública—, esto sin incluir abono a capital o amortizaciones, lo que representó su nivel más alto en términos reales desde 1990, de acuerdo a cifras de la Secretaria de Hacienda.
Esta cifra fue superior en 6.5% a los 382 mil 935 millones de pesos que desembolsaron 11 secretarías y tres ramos generales en la totalidad de los programas presupuestarios destinados a combatir la pobreza que hay en el país.
Lo anterior significa que el sector financiero y los inversionistas, tanto nacionales como extranjeros, que son acreedores de la deuda pública, se llevaron 8.3% del gasto público total en 2015 en ganancias sobre el capital que prestaron, una “rebanada del pastel” superior al 7.8% del presupuesto que se destinó a los programas para atender a los 55.3 millones de personas en situación de pobreza en el país, según las más recientes estimaciones del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social.
En la comparación respecto a 2014, el gasto en combate a la pobreza creció 1.2% real anual en 2015, en tanto que lo ejercido en el costo financiero de la deuda aumentó 14.8% real en el mismo periodo.
De igual manera, el mayor gasto en el servicio de la deuda en 2015 respecto a lo ejercido en superación de la pobreza contrastó con lo sucedido durante 2014, cuando el gasto en la atención de la población más vulnerable de México superó en 6.5 por ciento a lo erogado en el costo financiero de la deuda.
FUENTE- EXCELSIOR