Este miércoles se llevó a cabo en la Catedral Metropolitana de Xalapa la Misa Crismal, en la que se bendicen “los santos óleos” y en la que además los sacerdotes renuevas sus promesas sacerdotales.
Desde temprana hora, los presbíteros de la diócesis de Xalapa se congregaron, algunos acompañados por los feligreses de sus parroquias, para llevarse en peregrinación los óleos que ocuparán el resto del año para los sacramentos.
En su homilía, el arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, agradeció la disposición de los sacerdotes de su arzobispado por ser parte de los cambios en las parroquias de los distintos municipios que integran la arquidiócesis capitalina.
“En días pasados tuvimos varios cambios de sacerdotes, de parroquias, fueron 10 así casi de jalón y terminamos como 15 días antes de la Semana Santa, y en esa ceremonia siempre se le pide al sacerdote que haga el credo, que su profesión de fe y que renueve los juramentos de fidelidad a la Iglesia, a las enseñanzas del magisterio, a los principales dogmas de nuestra fe católica”.
Y es que a veces los cambios, explicó, van de un lugar más grade a otro más pequeño, o están muy distantes en su origen.
Con lo que también agradeció la disponibilidad de los sacerdotes ya que ha sido tiempo de muchas confesiones, debido a que llegar a juntarse hasta 10 horas de confesión por parte de los feligreses, “a la gente se le empiece a ofrecer y entonces basta con que vean burro para que se les antoja viaje”.
